"Tengo la intención de invitarles a Maranello [a todos los equipos], no con el objetivo de debatir sobre lo que puede ofrecer ventaja o desventaja a un equipo u otro, sino para hablar sobre el enfoque general de la F1. Creo que la gente no tienen demasiadas oportunidades fuera de los fines de semana de las carreras, en los que has de preparar el coche para los Grandes Premios, atender a los patrocinadores, la televisión, el público.... Quiero que sea un día tranquilo en el que todos hablemos para seguir adelante", reveló Montezemolo en Autosport durante la típica comida navideña que el equipo organiza cada año.
Dejar de lado la competitividad
Y es que di Montezemolo quiere que los equipos dejen sus intereses competitivos de lado durante la reunión, para poder acordar ideas que puedan ser beneficiosas para todos. "Me gustaría que tuviera lugar de una forma muy constructiva, sin discutir nada relacionado con la competitividad, simplemente para hablar sobre la naturaleza de la F1 con los equipos. Hemos de realizar propuestas para hacer algo, sin dejar a nadie de lado y nada debajo de la mesa [acuerdos]. Quiero hacerlo todo de forma totalmente abierta. Quiero que haya más diálogos entre los equipos, no sobre la competición, sino sobre los problemas con la F1".
Por último, el de Ferrari sugirió que se debería de pensar seriamente sobre la idea de que los equipos suministren a un tercer coche cliente a otras escuderías. Además, el italiano también quiere hablar sobre las reglas, como el plan de otorgar una doble puntuación en 2014, que están llevando al deporte hacia una dirección con la que muchos no están cómodos. "Una vez le conté a Max [Mosley, expresidente de la FIA] que no quería que pensáramos en algo parecido al fútbol donde, si llueve, los jugadores están obligados a llevar zapatillas deportivas porque resbalan más y eso lo hace aún más interesante, y quizás así el Real Madrid pueda ser batido por otro equipo. Eso es algo que no me gusta".