Después de todo eso, Ricciardo regresó a Colombo para completar una serie de entrevistas con la prensa, dar un paseo con elefantes y visitar el templo de Gangarama, además de practicar el cricket con algunos niños de la ciudad. Más tarde, el futuro piloto de Red Bull regresó al trabajo y practicó para el evento principal de la demostración, para terminar el día siguiente con un completo programa de tres tandas por las calles de la ciudad como parte del espectáculo preparado para el festival de la Colombo Night Race. Tal y como explicó Red Bull, Ricciardo llevó a cabo un programa refinado y elegante ante más de 100.000 espectadores.
Muy contento con la demostración
"Los últimos días han sido una experiencia increíble. Pilotar un coche en una demostración siempre te lleva a lugares exóticos y nuevos, pero esto ha sido simplemente increíble. La afición fue estupenda y eso te hace que tus pulsaciones aumenten de verdad. Espero haberles ofrecido un espectáculo digno de recordar, y estoy seguro de que así fue", comentó el piloto. La escapada a Sri Lanka supuso la última demostración del equipo de esta temporada. El RB7 ya viaja de vuelta a Milton Keynes, donde está situada la fábrica de la escudería.