"No estoy seguro de que se pueda decir que este (bajón de rendimiento) se debiera a la calibración del túnel de viento. Creo que a lo largo del invierno tuvimos un período de desarrollo razonable y una caída sensible en las evoluciones", comentó Fry.
Así, el británico señaló claramente el GP de Canadá 2013 como el punto en el que las mejoras comenzaron a dar problemas: "El primer paquete de actualización funcionó bastante bien, algunas partes mejor de lo que esperábamos, y comprendimos eso un poco más adelante. Hubo un paquete diferente que llevamos a Canadá del que no estábamos seguros, que luego nos dio algunos problemas al intentar entenderlo. Si me preguntaras en que momento nuestro desarrollo volvió a torcerse, fue en ese momento supongo".
El programa de desarrollo, de nuevo su talón de Aquiles
"Cuando estás desarrollando, si tienes una cosa que no funciona al 100 por ciento como esperabas, ¿qué haces con ella? Porque para entonces el modelo de túnel de viento ha progresado y cambiado y hay unas cuatro/seis semanas por delante. Cuando se intenta dar marcha atrás de algo así te encuentras con un montón de problemas adicionales", añadió Pat Fry.
Además, el cambio en la estructura de los neumáticos Pirelli perjudicó al equipo de Maranello, que había diseñado un monoplaza que no sobrecalentaba los neumáticos: "[El Ferrari] ha sido suave con los neumáticos y calentarlos ha sido una lucha, y si te tienes un neumático que se sobrecalienta eso simplemente nos ayuda mucho más. Eso no es un diseño algo inteligente o simulación ni nada, eso es sólo la elección de los neumáticos. Y como las cosas cambiaron, disminuyó nuestro rendimiento. Pero es cosa nuestra intentar hacer que el coche funcione con lo que hemos tenido".