La fiesta era completa en Red Bull que se ha proclamado también Campeón del Mundo de Constructores, a pesar de que Mark Webber abandonaba por un problema en el alternador yendo en segunda posición. Con su abandono, el podio lo completaban Nico Rosberg y Romain Grosjean, cuya carrera saliendo 17º es para enmarcar. Fernando Alonso tenía que conformarse con la undécima posición tras una carrera que se torcía en la salida al dañar el alerón en un toque con Webber.
Salida intensa
La vuelta de formación comenzaba en medio de un halo de tensión, conscientes todos de estar viviendo un momento crucial. La pista india podía ser el escenario de una página más en la historia de la F1. Una pista que marcaba 34ºC por unos 30ºC de temperatura ambiente. El semáforo se apagaba y Vettel comenzaba ligeramente mal. El alemán patinaba un poco y estuvo a punto de ser adelantado por los dos Mercedes.
Por detrás, Fernando Alonso salía bien pero su alerón impactaba con la rueda trasera derecha de Webber, perdiendo el endplate. El asturiano perdía posiciones y volvía a tener un toque en la curva cuatro con Jenson Button. Distinta suerte corría Felipe Massa que conseguía adelantar a los dos Mercedes en esa misma curva y se colocaba segundo por detrás de Vettel.
Vettel hacía una sorprendente parada en la vuelta 2 para poner el neumático medio, un movimiento que imitaba Alonso que aprovechaba para cambiar el morro. El alemán se reincorporaba 17º y Alonso 20º. Massa se quedaba liderando la carrera seguido por Rosberg y Hamilton, todos con el neumático blando. Webber esperaba expectante en la cuarta posición con el neumático medio.
Tras encadenar varias vueltas rápidas seguidas, Massa entraba en la vuelta 8 para hacer el cambio de neumáticos y poner el medio. El brasileño lo hacía en la misma vuelta que Hamilton y una después que Rosberg. Los tres se reincorporaban entre la octava y la undécima posición mientras Vettel avanzaba ya hasta la sexta y comenzaba a volar sobre el asfalto indio con un ritmo demoledor. El alemán avanzaba poco a poco y en la vuelta 23, tras adelantar a Sergio Pérez, ya era segundo detrás de Mark Webber.
El australiano y el mexicano, junto con Ricciardo y Sutil, cuarto y quinto respectivamente, eran los únicos en el top-ten que aún no habían hecho su primera parada. Massa conseguía aguantar en la sexta posición perseguido por los dos Mercedes mientras Alonso luchaba por abrirse paso desde la decimotercera posición.
Buscando la alternativa
Cuando todo parecía volver a estar estabilizado, Rosberg abría fuego de nuevo. Al no poder adelantar a Massa, Mercedes lo metía en boxes para hacer su segunda parada en la vuelta 27 y poner un nuevo juego de neumático medio. En la siguiente, Webber paraba y sorprendía montando el neumático blando, el cual le duraría cuatro vueltas, obligándole a parar en la vuelta 32. Una vuelta antes, Sebastian Vettel paraba para poner su segundo y último juego de neumáticos medios. Así, el alemán lideraba la carrera con Webber detrás, con toda la suerte echada hasta el final de la carrera.
Sergio Pérez y Fernando Alonso imitaban la estrategia de Webber montando el blando durante unas cuantas vueltas para luego volver a parar y cambiar al medio para aguantar hasta el final. El mexicano mantenía un buen ritmo y se reincorporaba décimo, pero en la lucha por el podio con Massa, Hamilton y Rosberg. Un podio del que Webber se apeaba demasiado pronto: el aussi abandonaba en la vuelta 40 por un problema en el alternador.
Recta final: lucha por el podio
Con las últimas paradas ya hechas, todas las cartas estaban echadas y los pilotos debían jugar con lo que les había tocado. Adrian Sutil era quien sorprendía con la jugada más arriesgada: el de Force India paraba en la vuelta 41 para hacer su primera parada en boxes tras salir con el neumático medio. Un número de vueltas muy por encima de las 35 que recomendaba Pirelli para este compuesto. De la misma forma, el alemán debía aguantar 18 con el neumático blando, teniendo en cuenta que la marca italiana recomendaba no superar las quince.
Con Vettel liderando con comodidad, la emoción se trasladaba al podio. Un podio que en un principio parecían disputarse los Mercedes, junto con Massa y Pérez al rebufo de todos. Pero los Lotus sorprendían haciendo una única parada: Räikkönen marchaba 2º con Grosjean tras él. Mientras Grosjean aguantaba con un ritmo aceptable, el finlandés veía cómo sus neumáticos se venían abajo. Grosjean le pasaba en el último sector tras un tenso momento en la curva cuatro. Felipe Massa perseguía a Grosjean y dejaban a Kimi detrás.
Una carrera que acababa con una imagen histórica: Vettel cruzaba primero, se convertía por cuarta vez en Campeón del Mundo, y decidía celebrarlo haciendo unos donuts en la recta de meta tras la vuelta de regreso a boxes. El alemán ha escrito una página más en la historia de la F1, relevando a un Fernando Alonso que marcó una época y hoy se ha tenido que conformar con la undécima posición. Habrá que esperar al año que viene para ver si Alonso puede volver a plantar cara y volver a poner su nombre a la Fórmula 1.
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27/10/2013