El joven piloto de 24 años, vigente campeón de la F3 británica y actualmente piloto de pruebas ocasional de Honda (además de participante de la GP2), tendrá que esperar un poco más si quiere dar el salto a la categoría reina.
Eso es lo que asegura Ross Brawn, jefe de la escudería, que cree que aunque tuvo una estupenda actuación en Mónaco al ganar la carrera, todavía no le ha llegado la hora: "Su victoria en Mónaco impresionó mucho al equipo, pero sólo hay uno o dos pilotos que saldrán de la GP2 la próxima temporada."
"Prácticamente hay que ganar el campeonato para formar parte de un equipo de Fórmula 1. Realmente hay que ser excepcional para estar ahí, pero no daría la espalda de Mike de todas maneras."
Sin ganar el campeonato, pero haciéndolo razonablemente bien, como Brawn asegura, Mike podría llegar a la Fórmula 1 en un futuro a medio plazo: "Ha hecho un gran trabajo para nosotros probando, y me ha impresionado. La dificultad es que la Fórmula 1 tiene un nivel tan elevado que muy pocos pilotos lo alcanzan. Espero que él pueda."