A las tres de la madrugada, hora española, comenzaban los primeros entrenamientos del Gran Premio de Corea 2013. Con el sol en el cielo y las posibilidades de ataque del tifón Fitow alejadas por el momento, la sesión arrancó con 21ºC de temperatura ambiente y 20ºC en el asfalto. El primero en salir al circuito fue Rodolfo González, que se subió al Marussia MR02 para sustituir a Jules Bianchi. Además de él, el otro cambio en esta sesión se produjo en el box de Force India, donde Paul di Resta cedió su VJM06 al inglés James Calado, que aprovechaba su segundo oportunidad a los mandos del monoplaza de Silverstone.
Sensores por doquier
Los primeros kilómetros de los pilotos sirvieron para marcar la vuelta de instalación de rigor. Una vez completada, todos regresaron al garaje antes de continuar con su programa. En este sentido, Sebastian Vettel y Jenson Button fueron los últimos en completar su primera vuelta, con pista totalmente despejada. Si hay algo que siempre caracteriza esta primera sesión de es el uso de parafina y sensores en los monoplazas. Un ejemplo de ello ha sido el Williams FW35, que en la parte delantera izquierda, junto al neumático, incorporaba un sensor en forma de parrilla que analizaba el flujo de aire proveniente de la zona lateral delantera del coche, un dispositivo algo más grande que el usado en el RB9.
Para este fin de semana, Pirelli ha traído al circuito de Yeongam el compuesto medio y el superblando, la misma combinación de neumáticos que en Singapur. En esta sesión en concreto, el neumático que se ha empleado ha sido el medio, con el que González ha marcado el primer tiempo de la jornada, parando el crono en 1:52.294. El de Marussia precisamente fue el primero en protagonizar una bandera amarilla en el asfalto: justo unos minutos después de marcar su primer crono, González cometía un trompo en la curva 13 y, como consecuencia, perdía el alerón delantero del MR02.
Pinchazo de Felipe Massa
Cuando el equipo Ferrari sacó sus dos monoplazas al asfalto, el resultado fue diverso. Por un lado, Felipe Massa estaba completando su vuelta de calentamiento de neumáticos para comenzar su tanda correspondiente cuando, de repente, le informaban por radio de que tenía un pinchazo en una de las ruedas, por lo que tuvo que volver al garaje. Mientras la Scuderia investigaba el origen de tal repentino problema, Fernando Alonso rodaba en la pista y en su primera vuelta marcaba un tiempo de 1:41.437 con el compuesto medio, que le servía para colocarse primero en la tabla de tiempos de la sesión.
Como es lógico, los tiempos se fueron mejorando con el paso de las vueltas y a medida que la pista iba evolucionando. Tanto así que, a falta de 22 minutos para el final, era Lewis Hamilton el que ostentaba el primer crono de la sesión, con un tiempo de 1:39.630, casi dos segundos mejor que el marcado por Alonso un rato antes. Junto al intercambio de posiciones en la tabla, se sucedieron las salidas de pista, como la que protagonizaron Calado y Grosjean en un intento por empujar en sus vueltas y lograr mejorar sus cronos. El susto final lo ha protagonizado Kimi Räikkönen: el finlandés ha tenido un accidente en la última curva, donde ha hecho un contravolante y ha terminado estampado en las barreras. El golpe ha sido fuerte pero, gracias a la larga escapatoria, se ha evitado una colisión más grave.
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06/10/2013