No obstante, Horner ha comentado que el equipo no se toma esos comentarios en serio. "Habría que ser estúpido para introducir un control de tracción en un coche que se rige por una sola unidad de motor, que la FIA se encarga de supervisar escrupulosamente. Por eso no imagino que ningún equipo pudiera hacerlo", señaló el de Red Bull.
El jefe de la escudería de Milton Keynes también ha reconocido que la emergencia surgida con los comentarios se debe más a que los rivales necesitan encontrar una explicación para justificar la razón por la que Vettel y Red Bull fueron tan rápidos en la última carrera. "Creo que el problema es que el rendimiento de Sebastian fue tan dominante en Singapur que, inevitablemente, genera dudas sobre su posibilidad", apuntó.
Mucho control en la FIA
"Otros equipos habrán estado pensando interiormente y la conclusión más fácil a la que llegan es que Red Bull debe de haber hecho trampa. Pero estas cosas están tan sumamente controladas que eso es imposible. El hecho es que condujo una carrera increíble en Singapur y tuvo un ritmo fantástico. Maximizó el potencial del coche, y fue un piloto en su máximo apogeo. ¿Se trata de una distracción [los rumores]? No. ¿Dejaremos de dormir por ello? En absoluto", añadió Horner.
Por su parte, Vettel también habló sobre los últimos comentarios vertidos sobre él y su RB9, aunque con algo más de gracia: "Estamos muy orgullosos del sistema que tenemos porque los demás jamás sabrán cómo lo hemos hecho. Tratamos de mejorar el monoplaza constantemente, eso es parte del trabajo que tratamos de hacer".