No obstante, el incidente más fuerte llegó el domingo en la carrera. Tras la bajada del túnel, Grosjean se tocó con el coche de Daniel Ricciardo por la parte trasera, destrozando ambos monoplazas y terminando con la carrera del australiano. Afortunadamente, los dos pilotos salieron por su propio pie del coche. A comienzos de esta semana, Eric Boullier, jefe del equipo Lotus, salía en defensa de Grosjean, asegurando que no cree que vaya a volver a ser el piloto temerario de la pasada temporada y demostrando su firme confianza que siempre ha tenido en su 'protegido'.
Muchos daños materiales
"Es complicado saber lo que el equipo Lotus va a decidir, pero lo que sí es seguro es que ha causado muchos daños materiales, y eso no es lo que el equipo necesita en su plan económico. Algún día de estos hará daño a alguien o se hará daño él mismo. Grosjean es un piloto increíblemente rápido, pero comete demasiados errores en la F1. Ha tenido varios años para poder entrenarse, pero ya no está en un buen sitio para continuar con ese entrenamiento", explicaba Mika Salo, expiloto de F1.
Por su parte, Jean-Eric Vergne, piloto de Toro Rosso y compañero de Ricciardo, prefiere hablar sobre el 'caso Sergio Pérez'. "Para que quede claro, no me gusta alegrarme de la mala suerte de los demás, ya que a mi también me han pasado cosas. Pero si algo he de decir es que Sergio no ha tenido mala suerte, sino que creo que finalmente abandonó porque quería o, al menos, hizo todo lo posible por ello. Como revancha, me gustaría decir que la palabra 'mala suerte' se aplica mucho mejor a Daniel [Ricciardo], ya que fue embestido por Romain", señalaba el compatriota del de Lotus.
