Kimi Räikkönen (7º):
"A pesar de que el coche fue muy bien el viernes, el sábado y el domingo estuvo algo más complicado de conducir. Desde el sábado por la mañana se ha estado comportando de una forma que no esperábamos por algún tipo de razón, sobre todo en mojado, donde tuvimos muchos problemas de agarre. Fue una carrera dura y perdí parte de mi alerón delantero al comienzo, algo que no ayudó, pero al menos pude conseguir algunos puntos, que es mejor que irse sin nada. Si pudiéramos volver a poner el coche como estaba en Australia estoy seguro de que estaríamos delante de nuevo".
Romain Grosjean (6º):
"Creo que podemos estar bastante contentos con el resultado. Fue una carrera dura, empezando en mojado y terminando en seco, pero eso es lo que hay en Malasia. Estuvo mucho tiempo detrás de Felipe en la fase media de la carrera y estoy seguro de que si le hubiera adelantado antes podría haber terminado más arriba, pero al final mis neumáticos estaban mal. No es el resultado que habríamos esperado al comienzo del fin de semana, pero al final han sido buenos puntos para el equipo, y trataremos de estar más fuertes en Shangai".
Eric Boullier, jefe del equipo Lotus:
"No ha sido el mejor día para nosotros, pero si tienes en cuenta nuestra posición en clasificación y el complicado inicio de ambos pilotos creo que los puntos que cogimos por ser sextos y séptimos marcan un buen resultado. Por desgracia, con las condiciones que hubo no pudimos ver el verdadero potencial del coche, y el tiempo que perdimos al principio siempre iba a ser duro de recuperar. Terminar a una distancia razonable de los líderes demuestra un gran esfuerzo de ambos pilotos y también del equipo en cuanto a la estrategia. Con un fin de semana normal estoy seguro de que podemos esperar mejores resultados".