Razia se mostró comprensivo y sereno tras hacerse pública la noticia, asegurando que "no estoy enfadado con nadie, siempre he sido tolerante con las personas y las situaciones adversas. La posición de Marussia es entendible, ellos nos dijeron que buscásemos una solución y avisaron de que también buscarían una para ellos", explica en una entrevista concedida al portal brasileño TotalRace. "Hablamos con varias empresas, pero ellos han terminado consiguiendo otro piloto para cumplir con los pagos que cubren las necesidades financieras que tenían."
Trabajará para volver a disponer de otra oportunidad en la Fórmula 1
Pese a que el golpe moral ha sido duro, Razia dejó claro que volverá a levantarse y seguirá adelante en busca de su sueño, que no es otro que el de hacerse un hueco en la parrilla de la Fórmula 1: "Existen dos tipos de fracasos en la vida: los circunstanciales y los existenciales, que son aquellos en los que se renuncia a lo que se cree. Este ha sido circunstancial. Hice todo lo posible, trabajé con las personas que creí que serían las correctas para ayudarme, pero no terminó dando fruto."
"Lo que tengo claro es que mi carrera no ha terminado. No me han hecho perder la fe y seguiré trabajando para conseguir mi objetivo, que es el mismo al que había llegado hace dos semanas. Siempre que me marco un objetivo me concentro totalmente en él, y es lo que he hecho en esta tentativa de disputar esta temporada."
"Ahora estoy un poco sin rumbo", reconoció. "Me gusta la idea de ganar y detesto perder, así que me voy a levantar de nuevo y trabajar en busca de mis sueños. Pero aún no he pensado en nada concreto."