En un evento muy escueto, introducido por una entrevista con Monisha Kalterborn, jefa de equipo del conjunto suizo, en la que Kalterborn mostró su ilusión porque Sauber continue creciendo más allá de la marcha de su fundador, ambos pilotos levantaron la manta para mostrar la creación que tratará de mejorar los resultados del C31, el coche de la pasada temporada, el más exitoso de la historia de la escudería.
Equipado con motor Ferrari y con unos pontones muy refinados, el C32 ha sorprendido por sus nuevos colores, ya que el gris se ha convertido en el color principal del equipo convirtiéndose en la base de la nueva decoración del monoplaza suizo. Por último, Sauber ha optado por no incorporar el 'modesty panel' de manera completa en la zona del morro mostrando una solución intermedia.