
Después de haber disfrutado del éxito en categorías inferiores, Forti se aventuro a escribir su propia historia en la Fórmula 1 en 1995. En su año de debut el equipo estuvo muy lejos de lo que se podría catalogar como un buen comienzo, muy lejos del resto de equipos y sin haber obtenido puntos en toda la temporada. Así, Pedro Diniz, que inyectó una importante suma de dinero a través de patrocinadores en el debut del equipo italiano, dejó el equipo para ponerse a los mandos de uno de los monoplazas del equipo Ligier.
Regresó a la F3000 Europea
En 1996 el equipo contaba con nuevos pilotos, Luca Badoer y Andrea Montermini, pero el equipo no pudo terminar la temporada por falta de recursos. Finalmente, Forti regreso como jefe de equipo de la F3000 Europea durante los años 2002 y 2003, para retirarse definitivamente del mundo de las carreras en 2003.