Ya os informamos hace días de que el Presidente de la FIA no sería bien recibido en el Principado, pero Max Mosley volvió discretamente al mundo de la F1 en Montecarlo ayer miércoles y algunos de los habituales del paddock ni siquiera se dieron cuenta de que estaba allí.
El diario británico The Times, que ha emprendido una cruzada particular contra el británico, dijo que la presencia del presidente de la FIA es la versión del deporte de "¿Dónde está Wally? ¿Dónde está Max?".
Más visible era el portavoz oficial de Mosley, Richard Woods, que insistió en que el presidente de la FIA estaba manteniendo reuniones como de costumbre en el edificio del control de carrera el miércoles y que seguramente aparecería más en público después.
Al parecer, Max se reunió con los jefes de equipo Stefano Domenicali y Flavio Briatore, mientras otro, el de BMW, Mario Theissen, creía que la presencia de Mosley pronto dejará de ser noticia.El alemán admitía: "Yo no lo buscaré."