La jornada de entrenamientos de la escudería anglo-holandesa Spyker ha resultado un tanto accidentada.
El día comenzaba con Van der Garde subido al monoplaza, probando los sistemas hidráulicos de cara al próximo Gran Premio de España, que se celebrará entre el 11, el 12 y el 13 de Mayo.Tras el mediodía se subía el alicantino Adrián Vallés, que comenzaba consiguiendo buenos registros, incluso mejorando los de Van der Garde, pero que en un despiste se salía en la curva 3, chocando violentamente con la pila de neumáticos de protección. Vallés no ha sufrido ningún daño físico, aunque los mecánicos de Spyker tendrán que trabajar duro para poner el coche a punto para Adrian Suttil, cuyo turno es mañana.
Vallés está aún un peldaño por debajo de los pilotos que optan a conducir un monoplaza de Fórmula 1. Sin embargo, el piloto alicantino derrocha talento, y no debe tener los fallos que ha cometido hoy si quiere ganarse la confianza de un director técnico de alguna escudería. De momento, de los tres pilotos que prueban con Spyker, Vallés es el tercero, por detrás de Sutil y de Van der Garde, que tienen más terreno comido que el alicantino en su carrera por llegar a la máxima competición del automovilismo mundial.
"Esta tarde hemos seguido trabajando en el apartado hidráulico y en la evaluación de neumáticos, y creo que hemos hecho progresos. Los tiempos han sido buenos teniendo en cuenta que rodábamos con neumáticos usados, y creo que hemos sido bastante consistentes. Por supuesto, no estoy contento con el accidente. No sé qué ha pasado en la curva 1, el coche se iba y pensaba que podría volver a boxes, pero el coche se me ha vuelto a marchar en la curva 3. Creo que en general el balance es positivo, ya que me he encontrado realmente cómodo hasta la vuelta previa al accidente, y no he cometido errores".