La elegida ha resultado ser el Gran Premio de Brasil de 2008, que ha acaparado el 40% de los votos de los aficionados, que recuerdan con mucho cariño la carrera en la que Lewis aseguró el campeonato del mundo en la última curva de Interlagos al superar a Timo Glock, que rodaba con neumáticos de seco, bajo el diluvio.
"En esas vueltas finales, nunca tiré la toalla," recuerda Lewis. "Ahora ahora, pasado el tiempo, lo recuerdo borroso. Esas vueltas finales que parecieron convertirse en una y sólo recuerdo adelantar a Timo, colocar el coche y pisar el acelerador. Con una mezcla entre miedo y alivio, crucé la linea y mi mundo se volvió loco. Fue un sentimiento inolvidable".
Sus actuaciones en Canadá entre las preferidas
Muy cerca de aquella carrera se ha situado el Gran Premio de Gran Bretaña de 2008 en el que el inglés logró vencer bajo la lluvia con el 36% de los votos, muy por delante de los Grandes Premios de Canadá de 2007 y 2012, que junto al Gran Premio de Japón de 2007 completan las cinco mejores actuaciones del piloto de McLaren en Fórmula 1.