A pesar de que Boullier se siente animado con el hecho de que todos los pilotos están intentando lograr una reducción de los costes, también advierte de que las malas decisiones podrían ser perjudiciales: "Es bueno que todo el mundo en el 'paddock' comprenda que necesitamos pensar cuidadosamente sobre el futuro de la F1. Pero definitivamente hemos de tomar la decisión correcta y no hemos de apresurarnos en tomar una decisión que podríamos lamentar. Ya tomamos alguna decisión en el pasado que nos está costando dinero ahora y que nos costará más dinero en el futuro. Así que hemos de estar seguros de ir en la dirección correcta".
Las decisiones que se tomen han de estar bien meditadas
La fecha tope que termina el 30 de este mes es importante porque será el último día en el que se podrán cambiar las reglas para 2013 sin la necesidad de una aprobación unánime de los equipos. Actualmente, Red Bull y Toro Rosso no opinan lo mismo que los demás equipos sobre el alcance del RRA, lo que significa que cualquiera de ellos podría evitar algún cambio para 2013 si no se soluciona todo antes del 1 de julio.
Boullier es muy consciente de la necesidad de realizar una solución rápida al problema, pero cree que lo verdaderamente importante es tener en cuenta lo que se ha de hacer, no la rapidez que se debe tener a la hora de resolver el problema: "Tenemos hasta el 30 de junio para votar, pero no significa que tengamos que cerrar el debate en unos pocos días. Es el hecho de tener que tomar una decisión lo que no se ha pensado detenidamente. Todos estamos de acuerdo en conseguir una F1 mejor, más sostenible y donde tengamos un plan a largo plazo. La reducción de los costes es parte de la estrategia, pero hemos de hacerlo de forma consciente".