A pesar de que ahora puede ser piloto de Mercedes en el DTM junto a sus funciones de comentarista de F1 de la BBC, Coulthard sigue siendo embajador de Red Bull Racing. Este fin de semana subió al RB7, monoplaza que logró el año pasado 12 victorias.
Gran respuesta por parte del público
El subcampeón del Mundo de 2001 se mostró realmente satisfecho con el recibimiento que le dieron en la capital de Azerbaiyán: "Fue genial conducir el coche en la avenida principal de Bakú. En realidad no sabía qué esperar cuando llegaba a Azerbaiyán y ¡estuve tan sorprendido de que la gente nos diera una bienvenida tan calurosa! Durante la vuelta final de protagonismo vi a un niño gritando mi nombre, instante que alegró mi día".