"En algún momento, cuando decía que iba a ganar, se dijo de mí que era prepotente e incluso chulo, y si ahora digo que me veo en otra posición, es porque también lo pienso, pero yo intento ser lo más sincero posible con el público."
El español habló un poco de todo en Montmeló y particularmente sobre el GP de Mónaco descartó que su equipo vaya a introducir mejoras, pero: "En ese circuito, uno de los más especiales del campeonato, es menos importante el motor, la aerodinámica o los frenos y eso lo convierte en una trazado ideal para los equipos que intentan dar una sorpresa. Ojalá para nosotros sea así."
Sobre el menor número de espectadores que han acudido este año al circuito catalán:
"10.000 o 15.000 espectadores menos apenas se notan, y la de España es la prueba a la que más gente acude en Europa. Para todos los pilotos, la carrera de España es especial, un Gran Premio casi único en cuanto a expectación y al apoyo del público, que se lo pasa bastante bien en las gradas."El asturiano no quiso hacer pronósticos sobre el ganador del Mundial:
"Aún queda mucha temporada, pero como casi todos, si tuvieran que apostar por uno lo harían por el finlandés Kimi Raikkonen."
Tampoco quiso comentar los rumores que le sitúan en Ferrari junto a Kimi:
"Todavía estamos en la cuarta carrera del campeonato y no estamos pensando en nada más."
Por último, Alonso descartó la posibilidad de que algún otro español que ahora compite en la GP2, como su paisano Javi Villa, pueda dar el salto a la Fórmula 1:
"Nadie llega a la F1 por arte de magia, hay que currárselo y mostrar la valía en las categorías inferiores, y algunos de ellos lo están intentando."