"A veces nos pasa a nosotros y otras veces a los demás. Desgraciadamente estaba en el Gran Premio de mi país, pero tengo buenas sensaciones porque al menos hemos estado luchando con los coches de arriba, cuando en las primeras carreras no podíamos ni verlos. Estaba rodando bien. Era lo que esperábamos".
"El podio estaba imposible. Iba a ser una lucha con Kovalainen y Heidfeld por el sexto y el séptimo puesto, como teníamos previsto. Pero al menos estaba rodando con ellos, podíamos verlos e incluso tocarlos. Es el camino, y me voy con una buena sensación. Massa paró dos vueltas después que yo, así que no es que tuviese mucha más gasolina, así que la clasificación de ayer fue realista. Es una pena romper, pero me voy contento".