El piloto polaco de BMW cree que: "Las diferencias entre los equipos se acortarán mucho en Barcelona y todas las escuderías tendrán un coche mejor." "El GP de España será más previsible que los tres primeros de la temporada porque todos los equipos conocen Montmeló como la palma de la mano."
Además, Robert considera que todas las escuderías van a llegar a la primera carrera europea del año en un estado de forma muy alto: "Tenemos que sacar el máximo al monoplaza. Si lo logramos, estoy firmemente convencido de que estaremos de nuevo en la parte delantera de la parrilla."