El piloto francés, que correrá en al menos nueve entrenamientos de viernes esta temporada, ha completado 46 vueltas a los mandos del nuevo VJM05 antes de pasarle el testigo a su compañero Paul di Resta por la tarde.
Las primeras sensaciones han sido positivas
"Me he acostumbrado al equipo y a la nueva forma de conducir. Ha sido un día importante para mí. Ha sido el primer día con el coche y las sensaciones han sido muy buenas. Necesitamos aún algo de tiempo para estar al límite porque no estamos empujando al máximo ahora. Estamos viendo cómo se comporta el coche", explicaba Bianchi.
Es la primera vez que el piloto, ganador de la GP2, conduce otro coche de F1 que no sea un Ferrari, equipo con el que rodó durante las jornadas para jóvenes pilotos en Abu Dabi en 2011.
No le importa la presión
Por ello, Jules Bianchi no tuvo dificultad en adaptarse al nuevo ambiente: "Ha sido una sorpresa. El coche se podía conducir perfectamente y estoy muy contento por ello. Tengo que ir poco a poco y sin ninguna prisa. Solo quiero hacer lo que el equipo me pida".
Además, el hecho de que los anteriores pilotos reserva de Force India sean ahora pilotos oficiales esta temporada, no supone ningún tipo de presión adicional para Bianchi: "Hay algo de presión, pero es parte del trabajo. Siempre he estado bajo presión en las carreras de la GP2, pero he de hacer mi trabajo".