"Sé que no es normal que las dos compañías vayan de la mano, pero en este caso ambas nos vimos afectadas. Somos fieros competidores, no sólo en la pista, sino también en el mercado, pero hay cooperación habitual entre las dos compañías. Por eso, estoy un poco sorprendido de que todo se esté viendo como un problema de la Fórmula 1, desde mi punto de vista no es así".
"La FIA es la cumbre de los clubs de motor del mundo entero, por lo que no sólo la industria del automóvil se ve afectada, si no los clubes. No me sorprende que Mosley no haya dimitido. He estado nueve años en la Fórmula 1, ya no me sorprende nada. Pero quiero añadir algo. Lo que no se puede negar es que todo esto parece una trampa. Y eso es algo que tampoco se puede aceptar".