El campeón de la GP2 en 2010, cuyos patrocinadores ahora pagan una gran cantidad de dinero por su asiento en F1, debutó junto a Rubens Barrichello y consiguió uno de los cinco puntos que acumuló el equipo Williams el año pasado.
Todos confían en una evolución
El piloto, de 26 años, ha confesado que se siente "más calmado" frente a la próxima temporada que está a punto de comenzar. Y comenta: "Confío en que el equipo desarrolle un coche mejor que el del año pasado". Además, admitió que 2011 fue un año duro para él, "sobre todo como piloto debutante", aunque insiste en que "disfrutó de cada momento en la pista".
El venezolano, que cuenta con el apoyo de la empresa petrolera PDVSA y del presidente Hugo Chávez, añade: "Fue una experiencia única y muy importante para mi carrera deportiva".
Su compañero este año será Bruno Senna, quién ha comentado: "Creo que Williams ha aprendido mucho de 2011. Un año complicado ayuda a que el equipo vea cuáles son sus puntos débiles. Han reemplazado a algunos trabajadores y han cambiado muchos procesos y cosas y están ansiosos por tener una buena temporada".