Ante este panorama, cabía esperar una explicación más concreta del porqué de las decisiones tomadas en este último mes, y en especial la de elegir a Buemi como piloto reserva tanto de Red Bull como de Toro Rosso, quedando Jaime apartado del programa de jóvenes pilotos. El portal de noticias 422race.com contactó con Marko, y la respuesta del expiloto austriaco no podía ser más concisa: "Tiene más experiencia en el simulador. Si ocurre cualquier cosa, (Buemi) es experto y puede hacer un buen trabajo en el simulador. Es parte de la familia Red Bull, conoce todo, y nosotros le conocemos a él."
De todas formas, Marko destacó que "un tercer piloto no es un piloto titular", y que Daniel Ricciardo y Jean-Eric Vergne han conseguido sus asientos en el equipo de Faenza porque Buemi y Alguersuari "no han alcanzado el calibre de los pilotos ganadores", matizando así las susodichas declaraciones a La Gazzetta.
"Tres años son suficientes" para demostrar su potencial
¿Influyó en todas estas decisiones aquel encontronazo de Corea? El austriaco asegura que "no, en absoluto. Hicimos una evaluación de las posibilidades y elegimos lo que consideramos mejor para nosotros. El trabajo en el simulador es una herramienta muy importante para nosotros." También afirmó que no existe ninguna clase de rencor hacia el catalán: "No, ¿por qué debería existir? Yo fui quien le trajo a la Fórmula 1, y después de tres años se podía ver cuál era su potencial."
Marko está convencido de que tres temporadas suponen tiempo suficiente para que estas jóvenes promesas puedan demostrar sus habilidades al volante y hacer gala de su talento para luchar por un puesto en el actual equipo campeón del mundo de constructores: "¡Han pasado tres años! Y en el caso de Alguersuari, dos y medio. Toro Rosso es un equipo cuya función es la de buscar a jóvenes pilotos y ocuparse de su desarrollo. Creo que tres años son suficientes, si usted piensa que deberían ser cinco, es su opinión, pero este no es el caso, y estamos hablando de mucho dinero."