Sin embargo, el australiano se muestra confiado de cara al año que viene, una confianza que tiene su origen en las pruebas que se realizaron en los últimos Grandes Premios de la temporada con los neumáticos experimentales que la casa italiana de gomas proporcionó a los equipos: "Cuando corrí con esos neumáticos en Abu Dabi y Brasil me sentí totalmente como en casa con ellas. Pirelli hizo un gran trabajo al llevar tantos juegos de los neumáticos que esperan usar en 2012 para desarrollarlos. Fue alentador para mí y para el equipo", dijo Webber.
El comienzo de la temporada 2011 fue bastante desalentador para el australiano, pero poco a poco consiguió mejorar a medida que avanzaba el año: "Tuvimos fines de semana más constantes, fuimos competitivos en la mayoría de las sesiones libres y el KERS comenzó a funcionar. Y tuve que hacer menos pit stops. Antes, tenía que hacer más stints [debido al mayor número de paradas], lo cual no estaba libre de riesgos. Pero a medida que la temporada avanzó conseguí hacer las mismas estrategias que los demás".
Lo más importante, el aprendizaje
El piloto de Red Bull valora positivamente este esfuerzo añadido. No en vano, todo lo que haya aprendido este año para mejorar el rendimiento de los neumáticos será igualmente útil la próxima temporada: "Ha sido una buena curva de aprendizaje para mí y para el equipo en términos de lo que podemos hacer para resolver esos pequeños detalles que marcan una gran diferencia el sábado en particular".
Webber cree que, en general, tanto equipos como pilotos, consiguieron alcanzar un mayor nivel de comprensión acerca del funcionamiento de los compuestos Pirelli. Esa es la causa de que las carreras se fueran estabilizando en términos de estrategia a final de año: "Lo más importante es que los equipos y los pilotos consiguieron controlar los neumáticos. Fue una gran curva de aprendizaje para todos y eso se vio en las carreras. Se suavizó al final del año porque todo el mundo ya comprendía los neumáticos".