En cambio estas declaraciones sobre la ciudad de Sydney parece que no se aplican cuando el británico trata de incorporar al calendario mundial una carrera en Rusia, concretamente en San Petersburgo, donde tampoco existe circuito alguno.
El mandamás de la F1 viajará el próximo fin de semana a dicha ciudad para negociar con sus gobernantes la posibilidad de albergar un GP en la metrópole rusa a partir de 2010. Bernie también podría charlar sobre el tema con Vladimir Putin, presidente del gobierno, sobre la posibilidad de construir un circuito acorde con las exigencias de la máxima especialidad del automovilismo.La noticia que daba el Daily Mirror dejaba muy claras las numerosas muestras de interés de Ecclestone por abrir la Fórmula 1 a nuevos países. Aún así, el jefe de la F1 asegura que hay mucho trabajo por hacer: "No hay nada hecho todavía, pero podría ser un interesante avance para el deporte. Quisiéramos tenerlo en el calendario tan pronto como podamos, pero depende de ellos".