Tanto Karthikeyan, que regresa a la Fórmula 1 desde 2004, como Vitantonio Liuzzi, tendrán 6 horas este viernes para comprobar su rendimiento y poder resolver algún problema que el monoplaza pueda plantear.
"Sin duda es una preocupación. Esperamos que el coche pueda dar un paso adelante, pero hasta que no lo veamos en pista no podemos saber lo bueno o malo que será el coche. Vamos a ver que pasa pero hay que seguir y seguir", declaró el piloto indio a pocas horas del comienzo de los primeros entrenamientos.
Karthikeyan añadió que no siente que haya perdido facultades después de tanto tiempo fuera de la Fórmula 1, pero contar con la experiencia de Liuzzi le servirá de ayuda: "Las cosas han cambiado mucho pero tener a Tonio como compañero de equipo será un buen indicio de donde estoy en cada sesión. Probamos el coche del año pasado y realmente no era tan malo, pero el de este año no sabemos como funcionará, vamos a ver que pasa".