"Definitivamente. También habríamos estado preparados para Bahrein, es la naturaleza de la Fórmula Uno. Siempre estamos listos para lo que haga falta. Sería bueno tomar las riendas de la temporada ahora que nos resulta un poco extraño no estar compitiendo a estas alturas del año."
Michael admitió que la fiabilidad de los nuevos elementos introducidos este año era algo muy alentador:
"Hemos tenido algún problema de fiabilidad durante el invierno, pero ninguno de ellos era gran cosa, excepto quizás en aquellos en que el KERS se ha visto involucrado. Algunos fallos nos han hecho perder algo de tiempo, pero son las consecuencias de tener tantos sistemas integrados en los coches de ahora. Por suerte, no hemos tenido ningún problema en las áreas conceptuales donde hemos estado volcando nuestro trabajo, como con los ejes de transmisión. Hemos completado con éxito 4969.2 kilómetros de tests."
También confía en que los problemas con el KERS hayan sido corregidos:
"Tuvimos un problema con el inversor de corriente, el cual está situado entre la batería y la MGU (generador del motor). El principal problema fue que cuando tuvimos aquel fallo, el inversor no estaba correctamente aislado. Por tanto, tuvimos que cambiar algunos elementos de su diseño para conseguir dicho aislamiento, y que el fallo no se volviese a repetir. Disponemos de una solución completa que nos permitirá usarlo en Melbourne."