Antes de comenzar a hablar sobre los pilotos de hoy y del mañana, quiero aclarar que soy de la opinión que en la F1 los que corren son los coches, no los pilotos, y que en consecuencia la F1 es más una competición de ingenieros que otra cosa. Los pilotos son piezas fundamentales para extraer del monoplaza todo su potencial, como lo son los mecánicos o los estrategas de carrera, pero no son ellos los que hacen campeón un coche. Si acaso es al contrario, no harán ganar a un coche perdedor, pero pueden hacer perder a un coche campeón; esto ya lo decía el gran Enzo Ferrari, que en la época en la que los pilotos de la F1 empezaron a ganar grandes sueldos y a ser considerados los principales protagonistas de los GGPP, incluso por encima de sus vehículos, manifestó tajantemente: "Los pilotos son esas personas que con sus errores impiden que mis coches ganen todas las carreras"; es muy posible que algún Jefe de Equipo actual suscribiera estas palabras.
Y por último, soy de la opinión que el margen de un ramillete de elegidos, una importante cantidad de los pilotos de la parrilla de un GP son perfectamente sustituibles e intercambiables sin que se aprecie una merma sensible en los resultados debido a la abundancia de talento en la categoría reina y las inmediatamente anteriores. Y como consecuencia de ello, y de lo manifestado en los dos párrafos anteriores, me atrevo a afirmar que llegar a ser piloto de F1 en la actualidad, y sospecho que en los próximos años, va a depender del talento deportivo de cada piloto casi tanto como de otros factores como la imagen pública, la nacionalidad, incluso el sexo, que se van a convertir (algunos lo son ya) en decisivos a la hora de llamar la atención de los patrocinadores y por ende de los equipos.
Partamos de un análisis de la situación actual de la parrilla de pilotos de F1. Desde mi personal perspectiva y a los meros efectos de explicar cómo serán los pilotos del mañana, yo clasificaría a los pilotos de la temporada 2011 en las siguientes categorías (hay 24 porque Hispania aún no ha confirmado a su segundo piloto y Lotus Renault tiene tres):
.- Los "Pilotos franquicia": Serían aquellos pilotos que con su sola presencia en un equipo aseguran la llegada de patrocinadores suficientes para hacerlo competitivo sin que ellos tengan que mover un dedo por conseguirlos. Junto a sus indudables méritos deportivos aportan una imagen pública atractiva para los anunciantes, aparte de garantizar una presencia constante en los medios de comunicación por ser los que cuentan con mayor número de seguidores a título personal, al margen del equipo para el que piloten cada temporada. En este grupo situaría a Michael Schumacher y a Fernando Alonso.
.- Los "Pilotos de la casa": Me refiero con esta denominación a aquellos pilotos tan vinculados a una escudería concreta que sería difícil imaginarlos pilotando para otra; son pilotos que han desarrollado toda su carrera, desde muy temprana edad, en el seno del mismo equipo, dentro de sus diferentes categorías de promoción, hasta llegar a triunfar en la escudería de F1. La simbiosis entre el piloto y el equipo es muy fuerte, ambos se adoran; el piloto, porque ha crecido en el seno de la escudería soñando con triunfar en ella algún día, y el equipo porque ve en el piloto un reflejo de todos sus esfuerzos y casi lo considera tan obra suya como el propio monoplaza. En este grupo englobaría a Lewis Hamilton y Sebastian Vettel.
.- Los "Pilotos profesionales": Son aquellos pilotos cuyas meras cualidades para la conducción les garantizan un puesto en un equipo de F1 sin necesidad de aportar patrocinios al mismo. Suelen encontrarse en los equipos punteros, que no suelen tener problemas para cubrir su presupuesto, y en los intermedios. Se espera de ellos que extraigan el máximo rendimiento del monoplaza que tienen entre manos y el equipo va a valorar su rendimiento en términos estrictamente deportivos. Forman este grupo Jenson Button, Felipe Massa, Mark Webber, Nico Rosberg, Robert Kubica (¡vuelve pronto, Robert!), Nick Heidfeld, Rubens Barrichello, Jarno Trulli y Kamui Kobayashi.
.- Los "Pilotos colaboradores": Constituyen un grupo intermedio, en el que es difícil sobrevivir; son pilotos de calidad contrastada buscados por los equipos para ayudarles a sacar el mayor partido de sus bólidos, pero a la vez deben aportar patrocinadores que ayuden al equipo a cubrir sus presupuestos. Ocupan normalmente el puesto de primer piloto en los equipos de la parte baja de la tabla y suelen ser aspirantes a entrar en la categoría de "profesionales". Coloco en este grupo a Heikki Kovalainen, Adrian Sutil, Timo Glock y Narain Karthikeyan.
.- Los "Pilotos en prácticas": Es el formado por aquellos pilotos provenientes de los programas de formación de los equipos de F1, los cuales suelen pasar una o varias temporadas en equipos de inferior nivel a la espera de demostrar sus cualidades para dar el salto a la escudería titular. Su presencia en el equipo "filial" viene impuesta bien por el dueño del equipo (Toro Rosso), o por acuerdos de colaboración entre escuderías. A diferencia de los pilotos del grupo anterior no necesitan aportar patrocinadores, pero su posición es muy inestable y dependiente tanto de los resultados propios como ajenos (los resultados de los pilotos de la escudería titular para ascender a "piloto de la casa", y los resultados de otros jóvenes valores del programa de formación para mantenerse como "piloto en prácticas"). En este grupo estarían Sebastién Buemi y Jaime Alguersuari (del programa Red Bull), Paul di Resta (del programa McLaren-Mercedes) y Jèrôme D´Ambrosio (del programa Renault).
.- Los "Pilotos patrocinados": Son aquellos pilotos que gozan del privilegio, debido a sus logros en categorías inferiores, de haber llamado la atención de una gran marca comercial, a veces incluso de todo un país cuyo gobierno se vuelca con ellos, marca que patrocina su carrera hasta la F1 llegando al punto de convertirse en el principal soporte comercial de un equipo de la parrilla. Su posición es similar al grupo anterior, el de los "pilotos en prácticas", siendo la única diferencia que éstos han sido seleccionados por los propios equipos mientras que los "pilotos patrocinados" son elegidos por marcas normalmente sin relación con el mundo de la competición. Por ello, su futuro depende tanto de sus resultados deportivos como de su capacidad para convertirse en la imagen mundial de esta marca. También guardan relación con los "pilotos colaboradores", de los que se diferencian por su menor experiencia y por el mayor importe del patrocinio aportado, detalle este último que les da la oportunidad de correr para mejores equipos. Es el caso de Vitaly Petrov, Pastor Maldonado o Sergio Pérez.
Partiendo de la clasificación efectuada anteriormente, me atrevo a predecir cómo será el piloto del futuro de la F1. Lo primero que quiero resaltar es el hecho de que los tres primeros grupos de pilotos son la base de la categoría, los pilotos que permanecen en el tiempo, mientras que los pilotos de las tres últimas suelen ser temporales, si en breve no ascienden a una de las tres primeras se ven fuera de la F1. Pero igualmente quiero decir que la inmensa mayoría de los pilotos llegan a la F1 por uno de los tres últimos grupos, es muy difícil que un piloto acceda directamente a la categoría de "profesional" tal y como la hemos descrito anteriormente. Difícil mas no imposible; Kamui Kobayashi puede considerarse que entró en la F1 directamente como "profesional", pues si bien sus primeras carreras fueron como "piloto de la casa", de la casa Toyota en su caso, a la siguiente temporada el equipo desapareció y fue contratado, sin mediar patrocinios, por Sauber, con quien disputó su primera temporada completa en la F1.
Por tanto, si queremos saber cómo será el piloto del mañana, fijémonos primero en los que llegan a la categoría, y después en los que se quedan en ella, para tratar de identificar un patrón. Lo primero que llama la atención es que los pilotos "en prácticas" son todos europeos, mientras entre los pilotos "patrocinados" abundan más los de otros continentes. Es lógico, tras la retirada de los equipos japoneses de la F1 la inmensa mayoría de las escuderías (todas menos Force India y Team Lotus) son europeas, por lo que fijan su atención en las categorías de promoción europeas; los pilotos americanos o asiáticos lo tienen más complicado a la hora de entrar en la cantera de una de estas escuderías, salvo que tengan la oportunidad de trasladarse muy jóvenes a Europa; en este sentido conviene destacar el proyecto de la escudería Force India de becar a jóvenes pilotos indios para cursar sus estudios en Gran Bretaña, de modo que puedan competir en las competiciones europeas durante su adolescencia.
Lo dicho anteriormente es muy importante, en la medida en que implica un sistema meritocrático, en el que son los mejores los que acceden a la F1, algo que no siempre ha sido así en la categoría. La forma de llamar la atención de los equipos o de los patrocinadores es la obtención de triunfos en las categorías inferiores, y la parrilla de 2011 puede presumir de estar conformada por pilotos que coparon las primeras posiciones de las categorías previas en las que participaron. Ciertamente, aunque "son todos los que están, no están todos los que son", y campeones de GP2 u otras categorías ha habido que no han llegado a la F1; pero la parrilla de un GP tiene las plazas contadas y no caben todos. En este sentido sí es cierto que el nivel de los pilotos "patrocinados" previo a su llegada a la F1 suele ser mejor que el de los pilotos "en prácticas"; otra cosa es su desempeño una vez en la máxima categoría, el cual depende de otros factores aparte del mérito personal; así Nelsinho Piquet batió a Timo Glock en 2006 en la GP2, o Nico Hülkenberg superó a Vitaly Petrov en la de 2009, y sin embargo los que permanecen a día de hoy en la F1 son los dos segundos.
Precisamente, este aspecto de la continuidad también merece ser destacado; porque si nos fijamos en el elenco de pilotos del 2011 y lo comparamos con el 2010, vemos que los pilotos "profesionales" son prácticamente los mismos aunque se ha caído Hülkenberg, de los pilotos "en prácticas" permanecen los de Toro Rosso (aunque parece que cuestionados y con su recambio, Ricciardo, preparado como piloto suplente), de los "colaboradores" ya no están Chandhok, ni Di Grassi, ni Yamamoto, ni Klien y de los "patrocinados" sigue Petrov, pero se cae Senna; por último, parece que De la Rosa y Liuzzi se están disputando el asiento que queda libre en Hispania, pero uno de los dos también causará baja en la categoría. Muchos cambios, muchas caras nuevas este año en la F1, lo que da idea de que si difícil es llegar, dificilísimo es mantenerse, y de nada sirve un buen patrocinio (caso de Bruno Senna, patrocinado por la operadora telefónica Embratel) si los resultados deportivos no acompañan. En este sentido, bastante fortuna ha tenido Vitaly Petrov de contar con una segunda oportunidad tras una decepcionante primera temporada en Renault; de hecho, de todos los pilotos que debutaron en la categoría en el 2010 es el único que va a repetir, si dejamos fuera de los novatos a Kobayashi por haber disputado los últimos GGPP del 2009.
Hagamos una recapitulación de lo dicho hasta ahora; a la vista de lo sucedido en las últimas temporadas, los pilotos del mañana de F1 serán:
.- De gran nivel técnico, demostrado en las categorías inferiores. Y señalo este aspecto porque no siempre ha sido así en la F1, en la que durante muchas épocas sólo han llegado los pilotos que podían pagárselo, al margen de su nivel técnico.
.- De rápida adaptación a la categoría, los equipos no van a darles segundas oportunidades; este detalle está muy relacionado con el anterior.
.- Con la capacidad de seducir bien a un gran equipo para entrar en su programa de jóvenes pilotos, bien a una gran marca que les patrocine o financie. Por la ausencia de esta característica vemos que campeones de categorías inferiores no llegan a la F1 mientras sus rivales, a los que derrotaron en la pista, sí lo hacen.
.- De muy diferentes nacionalidades, aspecto éste muy relacionado con el anterior y de más importancia de la que generalmente se le asigna.
Profundizando un poco en los conceptos anteriores, podemos derivar algunas características secundarias pero no por ello menos importantes:
.- Desaparecen los llamados comúnmente "pilotos de pago", entendiendo por tales aquellos pilotos cuyo único mérito para acceder a manejar un F1 es podérselo pagar, comprando su asiento a la escudería. Los que he llamado "pilotos patrocinados" han tenido que demostrar en categorías inferiores su valía para poder así conseguir el ansiado patrocinio; es más, estos "pilotos patrocinados" serán en el futuro una categoría superior a los llamados "pilotos colaboradores", en la medida en que sus mejores resultados en categorías de promoción les permiten acceder a un patrocinio mayor y por tanto entrarán en la F1 en mejores equipos. Así, Petrov entró en Renault, Maldonado irá a Williams y Pérez a Sauber, todos ellos equipos que debieran darles la oportunidad de puntuar con asiduidad.
.- Los pilotos novatos en la categoría deberán demostrar sus virtudes rápidamente para llegar a ocupar una plaza entre los llamados "pilotos profesionales", pues no van a tener una segunda oportunidad si en su primera temporada no consiguen llamar la atención de los equipos más competitivos. Ello implica una rápida adaptación a los monoplazas de F1, en los que la electrónica y la correcta puesta a punto tiene cada vez más importancia para ser capaces de sacarles el máximo rendimiento explotando todas sus posibilidades; los que basen su estilo de conducción tan sólo en acelerar y frenar tendrán muy difícil mantenerse en la categoría. En este sentido, prevalecerán los pilotos más completos, con un mayor conocimiento del coche y su funcionamiento, frente a los instintivos.
.- El verdadero "equipo" por el que ficha un piloto no será su escudería, sino sus patrocinadores, que son los que le abrirán las puertas para subirse a un monoplaza hasta que alcance la categoría de "profesional" y aún después. Así, los pilotos deberán cuidar su imagen pública y su trato con los medios de comunicación para hacerse atractivos a las marcas comerciales casi tanto como su preparación técnica; es significativo que el actual Campeón del Mundo de Moto GP, el español Jorge Lorenzo, no haya logrado aún un patrocinio comercial para correr este año, problema que no han tenido sus principales rivales Valentino Rossi, Casey Stoner o Dani Pedrosa.
.- Cada vez tendrá más fuerza el concepto de "piloto nacional", es decir, aquel piloto que asume la representación de su país en el Mundial, focalizando el interés de los aficionados locales, acaparando los principales patrocinios de su nación de origen, mas también dificultando por tanto la llegada a la categoría de otros compatriotas. Un veterano como Trulli ha manifestado el problema que para un piloto italiano representa conseguir patrocinios para pilotar en F1 debido a que las empresas transalpinas se vuelcan con Ferrari y no prestan atención a sus pilotos; Hülkenberg se ha visto fuera de Williams por no poder aportar patrocinadores al equipo al estar la parrilla saturada de pilotos alemanes; De la Rosa tiene en su contra coexistir con Fernando Alonso, el actual emblema de la F1 en España. Por el contrario, pilotos como Karthikeyan, Petrov, Pérez o Maldonado representan la ilusión de todo un país y concentran gran número de ayudas económicas de las principales empresas de sus lugares de procedencia. No es descabellado predecir que en la F1 cada vez habrá pilotos de un mayor número de países, pero simultáneamente será difícil la presencia de más de un piloto por país, seguramente con las honrosas excepciones de Gran Bretaña, Alemania y Brasil, inagotables canteras de talento automovilístico y potencias económicas de primer orden mundial; ello nos llevará a un Mundial cada vez más "mundial", pleno de héroes locales que no sólo correrán por sí mismos, también lo harán por su país como sucede en el resto de deportes.
.- Y finalmente, a modo de corolario, me pregunto si en el futuro inmediato veremos pilotos de sexo femenino. Precisamente por todo lo comentado hasta ahora, mi opinión es que sí, que en breve veremos una mujer al mando de un monoplaza de F1. Porque cada vez hay más mujeres en las categorías inferiores compitiendo con hombres a un nivel aceptable, y porque supondrán un tirón publicitario de primera magnitud para el equipo y patrocinador que se atreva a ofrecerles un volante; ni que decir tiene que en el capítulo de imagen pública y relaciones con los medios de comunicación llevarán varios cuerpos de ventaja a sus rivales masculinos. No es necesario que sean campeonas, ni siquiera que suban al podio de vez en cuando (aunque todo se andará), bastará con que no desentonen para llevarse de calle la atención de todos los aficionados.