Aunque podría sonar (y de hecho, suena) a excusa, lo cierto es que el rendimiento de Fernando Alonso tanto en la clasificación como en la carrera distó mucho de lo demostrado el viernes en los entrenamientos libres. La causa puede haber estado, según el piloto, en un pequeño percance que a priori no debería haber sido mayor problema, pero que afectó al MP4/22. Al parecer, la noche del viernes al sábado
un paflón de luz cayó sobre el alerón frontal del monoplaza, lo cual podría haber afectado a su comportamiento. Aunque el equipo le restó importancia, y cambiaron la pieza sin mayor problema, para el asturiano algo tuvo que pasar porque encontró el coche diferente a como lo había dejado el viernes.
"A lo mejor alguien cometió un error al montar de nuevo el coche después de ese percance", declaró Alonso al periódico italiano 'La Gazzetta dello Sport'. "Lo cierto es que el coche se comportó de una forma muy extraña desde ese momento". Eso explica el mal rendimiento del piloto en carrera y en la clasificación, y porqué en el segundo repostaje le retocaron el morro, subiendo un poco la altura del alerón.
Por ello, Alonso no notaba diferencias sustanciales en la adherencia entre los compuestos medio y duros. "Si hubiese corrido con los intermedios habría sido lo mismo", señaló el bicampeón al medio italiano.