El presidente del equipo de Maranello tiene claro lo que hay que cambiar: "Tenemos que concentrarnos en tres puntos fundamentales: en primer lugar, la Fórmula Uno se basa de una manera excesiva en la aerodinámica. En los 70 eran más importantes los motores y la mecánica, ahora todo es aerodinámica. El segundo aspecto es sobre los test: un deporte de este nivel no puede continuar con esa limitación de entrenamientos que es absurda tanto en relación al desarrollo como en términos de seguridad para nuestros nuevos pilotos. Por último, aunque no por ello menos importante, está la transferencia tecnológica. La Fórmula Uno tiene que ser más un laboratorio, un centro de investigación avanzada en teconologías innovadoras para los coches de calle del futuro".
Sin embargo, hay algo que preocupa a Ferrari por encima del peso específico de la aerodinámica, de la limitación de test o la apliación de tecnología en la industria automovilística. Y eso no es otra cosa que el futuro motor de 4 cilindros y 1,6 litros.
Montezemolo reconoció haber pedido a Jean Todt, presidente de la FIA, "la introducción de los motores de 6 cilindros en lugar de los de 4", ya que en su opinión, "un motor Ferrari de 4 cilindros le parece absurdo", ya que el de 6 cilindros "estaría más en línea con la Fórmula Uno y tendría un mejor posicionamiento en el mercado".Sobre la estructuración que ha sufrido la dirección deportiva de Ferrari, Montezemolo insistió que dista mucho de ser una revolución y que no tendrá ningún efecto especial en los pilotos.
"Hemos reestructurado la organización de los equipos individuales, con la esperanza de que Felipe Massa sea competitivo desde el inicio, y Fernando Alonso tenga la misma capacidad que en el último año, donde demostró que es el mejor piloto del mundo", afirmó Montezemolo.
Sobre los rumores que relacionan a Sebastian Vettel con el equipo de Maranello, Montezemolo fue claro: "No hay absolutamente nada con Vettel. Espero que el próximo piloto en la escudería sea uno que venga de la academia de pilotos de Ferrari, porque significaría que es un piloto puntero".
Por último, el presidente de Ferrari se mostró seguro de que la presencia de la bandera italiana en el alerón trasero del F150 no provocará molestias entre los aficionados no italianos, ni con los políticos de su país.
"Durante los últimos 20 años hemos lucido siempre la bandera italiana en el coche. En 2011 es el año en el que aún somos más italianos y estamos orgullosos de serlo".
