A pesar de que el presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo calificó la Fórmula Uno como "una prisión para los equipos" e insinuó que 2013 podría ser la fecha elegida para iniciar una nueva era lejos del escenario actual, Bernie Ecclestone no ha mostrado ni un ápice de preocupación al respecto.
"Es lo que dice (Montezemolo) cada vez que va a Monza: 'Necesitamos más dinero'," aseguró Ecclestone. "No van a separarse. Lo han intentado todo antes. Luca es un chico adorable, pero le gusta decir estas cosas y luego olvida lo que ha dicho".
La entrada de motores de cuatro cilindros supone un paso más en la degradación de la Fórmula Uno como el mayor reto tecnológico del mundo del motor en opinión de parte de los equipos, que también lamentan el injusto reparto de las ganancias.
Todo ello hace que vuelva a surgir la opción de instaurar un campeonato paralelo, que ya estuvo a punto de concretarse en la pasada temporada, aunque Ecclestone asegura que sería "un completo sinsentido" que los equipos abandonaran la Fórmula Uno.