"Abu Dabi será un fin de semana emotivo para todo el mundo en Bridgestone Motorsport, ya que será nuestra última carrera", comenta Hiroshi Yasukawa, director de Bridgestone Motorsport. "He estado involucrado en las operaciones automovilísticas de Bridgestone desde nuestra entrada limitada en los Grandes Premios de Japón de 1976 y 1977, y trabajé duro para nuestra entrada a tiempo completo, la cual llegó finalmente en 1997."
"En este tiempo, Bridgestone ha crecido enormemente como compañía, con la Fórmula Uno mostrando nuestra fuerza y cualidades en el escenario mundial ante un público enorme. He asistido a más de 200 carreras por mi cuenta y he tenido muy buenas relaciones con los participantes en este maravilloso deporte. El año que viene será muy diferente para mí y para todos mis compañeros de Bridgestone Motorsport."
La principal razón que impulsó la entrada de Bridgestone en la F1 fue dar a conocer su marca, y para lograrlo, los neumáticos tenían que mostrar un buen rendimiento. Durante los catorce años que la marca japonesa ha estado en esta categoría, Hirohide Hamashima ha sido el encargado de liderar el proceso técnico de desarrollo de dichos neumáticos."La Fórmula Uno era un gran reto para nuestra compañía", comenta Hamashima. "Entramos a este deporte en 1997 contra un competidor muy experimentado, Goodyear, el cual había participado en muchas carreras anteriormente, aunque fuimos capaces de ser competitivos en nuestra primera temporada, incluso cuando muchos de los mejores equipos estaban utilizando los productos de nuestros rivales."
"Sumamos puntos en nuestra primera carrera, y el primer podio de Bridgestone llegó en la segunda. Estuvimos cerca de la victoria con Damon Hill y el Arrows Yamaha en Hungría, así que fue un muy buen debut para nosotros."
Goodyear se marchó de la Fórmula 1 a finales de 1998, dejando a Bridgestone como el suministrador único: "Nuestra entrada en la Fórmula Uno llegó un año antes de lo previsto, y tras sólo dos temporadas en la categoría tuvimos que suministrar a toda la parrilla", explica Peter Grzelinski, gerente de servicio de Bridgestone Motorsport. "Ésto fue un gran reto para nosotros, pero Bridgestone respondió bien. Tuvimos dos temporadas donde pudimos afinar todas nuestras prácticas y metodología antes de que llegase el año siguiente."
En 2001, Michelin entró a la F1 como rival en cuanto a suministro de Bridgestone, abriendo un período de intensa competición: "Desde 2001 a 2006 peleamos duro con Michelin. Nuestros ingenieros en Japón y en pista estaban dedicados a ganar, y aprendimos muchas cosas en este período", afirma Hamashima.
Durante estos seis años, Bridgestone se alzó con los títulos de pilotos y constructores en cuatro ocasiones, antes de convertirse de nuevo en el suministrador único de la parrilla en 2007, cuando Michelin dejó la categoría, y pasar a ser el proveedor oficial de neumáticos del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 desde 2008 a 2010.
"Nuestro segundo período como único suministrador de neumáticos en la F1 se caracterizó por una intensa igualdad en el campeonato. Nos concentramos en nuestro control de calidad para asegurar que los neumáticos suministrados a todos los equipos fuesen los mismos, permitiendo dicha igualdad en la lucha por el mundial, lo cual proporcionó un fantástico espectáculo para los aficionados de todo el mundo", prosiguió Hamashima.
"Bridgestone se ha beneficiado notablemente de nuestra participación en este fabuloso deporte. Esperamos que todos disfrutéis de nuestro último Gran Premio tanto como lo haremos nosotros", concluyó Yasukawa.