Este tobogán situado a las afueras de Sao Paulo es un circuito duro para los pilotos, que año a año son juzgados por su precisión en la S de Senna. La larga subida hacia los boxes prueba a los motores, que tendrán una importancia capital en este Gran Premio. El final se acerca y nadie puede permitirse más fallos.
Alonso nunca ha ganado en la tierra de Senna. Tal y como vimos en citas decisivas de otros años y en las carreras que le han permitido liderar el Mundial, el asturiano tenderá a conservar su mecánica y obtener un buen número de puntos esperando los fallos de sus rivales para llegar en cabeza a la decisiva cita de Abu Dabi, el auténtico objetivo de Alonso.
Por primera vez en lo que va de año, Red Bull tendrá que atacar en lugar de defender su renta. Necesitan un doblete para presionar a Alonso. Y esa presión en aumento podría hacerles fallar, decantando la balanza a favor del piloto de Ferrari, que debería contar con su compañero Massa, hipermotivado al correr en casa, como otro candidato a subir al podio.
También será interesante de ver si pilotos como Robert Kubica (segundo en 2009) o Rubens Barrichello son capaces de meterse entre los cuatro que siguen luchando por el título, de la que descartamos a Jenson Button, que saldrá de las ecuaciones en Brasil salvo sorpresa mayúscula.
Con la lluvia como eterna amenaza en el cielo, la batalla en Brasil llevará un paso más allá la lucha al límite que los candidatos están ofreciéndonos en las últimas carreras. Alonso debería ser fuerte en Brasil, pero Red Bull sigue teniendo el mejor coche y Hamilton parece temible en su papel de 'outsider'. ¿Quién llegará mejor posicionado a Abu Dabi?