
Wolff pagó 16 millones de dólares por un porcentaje del 10% -que tampoco se especificó en su momento-, estableciendo el reparto accionarial en un 63% para Williams y un 27% para Head. Extrapolando el precio de la venta, se podría valorar al equipo británico en 160 millones de dólares.
Las razones del acuerdo fueron puramente económicas, como explicó SIR Frank Williams. "La venta es totalmente por motivos privados. Hablando por mí mismo, ya es hora de pagar algunas facturas, como la de mi hipoteca," comentó en su momento Williams.