La posibilidad de que Porsche se presente en un Gran Premio por primera vez en más de dos décadas será debatida en una reunión del consejo de Volkswagen el mes que viene, y ya se ha ganado el apoyo del propietario de los derechos comerciales de la F1, Bernie Ecclestone, quien facilitaría un regreso que "suena absolutamente genial".
Pero la perspectiva de Honda es aún más intrigante. La marca japonesa fue el primero de una serie de fabricantes en dejar la categoría cuando decidió retirarse tras la temporada 2008, encendiendo la mecha que vería a Bridgestone, BMW, Toyota y casi Renault tomando otros caminos debido a la crisis mundial.
La clave de la marcha de la marca nipona fue la insuficiente cantidad de dinero obtenido en pista en comparación con lo invertido en el equipo con sede en Brackley, lo cual de forma irónica, sirvió para que el año siguiente consiguiese el título de pilotos y el de constructores ya bajo la denominación Brawn GP, tras la venta a Ross Brawn.Sin embargo, con la propuesta de los motores de 1.6 litros, cuatro cilindros y turboalimentados de cara a 2013 en adelante, y Honda habiendo conseguido grandes éxitos en la anterior era turbo del deporte en los años ochenta, parece que su regreso podría estar sobre la mesa, como comentó el comentarista de SPEED TV y respetado periodista Will Buxton en twitter: "Escuchando un rumor de que cierto fabricante de motores japonés quiere regresar si los turbos vuelven en 2013. Empieza por H y termina por onda"
Al igual que Porsche, Honda ha estado involucrada en la F1, consiguiendo éxitos al más alto nivel, desde los años sesenta. La reaparición en la parrilla de dos de los nombres más legendarios y experimentados de la categoría podría establecer un punto de referencia totalmente diferente para los nuevos participantes.
