Incluso se ha hablado de la posibilidad de iniciar un boicot en el futuro reciente del campeonato por dicha decisión. En Bahrein se ha producido una protesta enérgica de la mayoría de pilotos que en principio iba a derivar en que todos los pilotos debían abandonar la parrilla y esperar en los boxes hasta que dicha decisión fuese revocada.
Uno de los cabecillas, cuyo nombre permanece en el anonimato, declaró su enfado y el del resto de participantes acerca de que el jefe de la F1, Bernie Ecclestone, no haya permitido el acceso a la parrilla de los fisios. Según los pilotos son personas clave en el entorno que los rodea en los minutos previos a iniciar una carrera, ya que les ayudan a estar en plenitud de condiciones.
Por lo que se comenta, Ecclestone ha hablado con los pilotos con la idea de hacerles ver que hay demasiada gente en la parrilla, y que si realmente necesitan a los fisioterapeutas los equipos tendrán que hacerles un pase especial, algo nada fácil ya que existen restricciones en la entrega de pases de parrilla.Una vez que la protesta amainó en Bahréin, el portavoz anónimo también aseguró que el plan a seguir en la siguiente carrera, el Gran Premio de Australia en el Albert Park es el mismo que el de este fin de semana, es decir, hacer presión para que puedan entrar los fisios.
Veremos en qué acaba todo este asunto.