El actual campeón del mundo, en declaraciones al diario alemán Sport Bild, ha reconocido que en su andadura en la Fórmula Uno habia vivido en una nube de éxito y elogios que en este 2009 se han tornado en "malos momentos que ayudan a construir tu carácter."
"En los últimos meses he crecido mucho porque he aprendido cómo encajar y superar los reveses", señala Hamilton. "Y en ese sentido probablemente este año me ha ayudado más que cualquier otro antes".
Hamilton ha reconocido que meses más tarde, hubiera manejado el asunto de los comisarios en Melbourne de otra forma. "Ahora daría un paso atrás y escucharía mis instintos. Las dudas que tuve sobre si debía mentir o no, ahora me las tomaría de una forma mucho más seria."El británico concluye que pensar en obtener una victoria en esta temporada es una quimera. "En realidad ya no nos interesa el puesto en el que acabemos esta temporada. Tenemos que hacer todo lo posible para asegurarnos de que dispondremos del mejor coche de la parrilla el próximo año," decía Hamilton.