La nueva temporada de Fórmula 1 no tardará en arrancar para Williams Martini Racing ya que mañana es el día marcado en el calendario para su lanzamiento de coche. El equipo de Sir Francis Williams es uno de los participantes que más expectativas han estado alimentando durante el invierno, por ejemplo, gracias a la batalla por el asiento que el brasileño Felipe Massa dejó libre al final de la pasada temporada 2017. Williams presentará mañana su nueva máquina de trabajo, que conducirán Lance Stroll y Sergey Sirotkin. El piloto ruso fue la decisión final después de todos los test y negociaciones, mientras que Robert Kubica, que se ha recuperado finalmente de forma heroica tras un accidente de rally en Andorra.
El equipo británico acabó la pasada temporada en la quinta plaza, delante de Renault y Toro Rosso, que pelearon encarnizadamente por la sexta, lo cual posiciona a Williams en un nivel superior a ambos, y tal resultado es, para Paddy Lowe, prueba que el equipo mantiene una estructura convenientemente dispuesta, ya que la diferencia entre sus puntos y los de Force India y Renault, delante y detrás de los ingleses respectivamente, no se deben a fallos que necesiten una solución radical, unos cambios sustanciales que remuevan los cimientos del equipo al completo, sino que más bien la que se necesita es una mejora sutil de las formas en que los departamentos funcionan."Yo creo que sí es importante enfocar nuestro esfuerzo en el proyecto mismo, esto es: el coche de 2018, pero realmente la clave está en mejorar los aspectos que caracterizan a nuestra organización, necesitamos desarrollar la capacidad en ese sentido. Por lo tanto, las mejoras que estamos buscando en los ámbitos mecánico y tecnológico es el asegurarnos que utilizamos bien nuestro presupuesto, organizar a la perfección la distribución del mismo. Tenemos que estudiar la manera en que gestionamos las inversiones en cada área de la manera más conveniente. Son estas las tareas en que estoy trabajando de forma paralela al propio proyecto en sí mismo, es decir, el coche como tal", explicaba Lowe a RACER.
Williams necesita tener mejor criterio que Mercedes
"No hay nada más necesario, no hacen falta cambios radicales, además de que no es mi estilo llegar y arrasar con todo creando una revolución. No lo encuentro necesario ni efectivo. La realidad es que lo que he encontrado al llegar aquí es un buen equipo, y hacer las cosas bien es de lo que trata la evolución: esa es la buena dirección. Vamos a llevar a cabo medidas que fortalezcan nuestras partes más débiles con el enfoque y las prioridades bien colocadas. No hay nada particular que pueda subrayar, y si lo hubiera tampoco lo describiría", añadía Lowe.
La perspectiva de Lowe, que viene de una larga carrera en Mercedes, se caracteriza por su propia y única posición particular que le permite comparar los proyectos inglés y alemán, de forma que su testimonio es doblemente valioso. Así, Lowe asegura que Williams es capaz, a diferencia de Mercedes, de llevar a cabo multitud de proyectos al mismo tiempo, y elaborar planes distintos para diversas medidas, de forma que la división de trabajo y la respuesta divergente hacen que la dinámica en Williams sea mucho más cómoda que en la estricta Mercedes, cuyos resultados, sin embargo, no dejan de superara a los del equipo británico.
"Lo que sucede es que la diferencia entre equipos grandes y pequeños se basa en la diferente disposición para responder ante las constricciones que el presupuesto supone. Por ejemplo, elaboras toda una lista de problemas que necesitan resolverse más urgentemente, y al mismo tiempo eres capaz de filtrar dichos problemas entre los que puedes permitirte realmente responder con una solución factible y los que no. En esta cuestión, la alta capacidad de un equipo como este para discriminar tareas con buen discernimiento es clave para la competición. Elaborar los juicios convenientes acerca de las cosas que valen la pena hacer ya, y las que dejarás pasar un día más es vital para nosotros", explicaba Lowe.
