No obstante, entre proclamaciones de que el deporte necesita realizar un cambio reglamentario fundamental durante la temporada, lo cierto es que cada equipo tiene poder de veto en este caso, ya que se necesita unanimidad para cambiar el formato. Por este motivo, la reunión que se llevó a cabo el domingo en Baréin no produjo buenos frutos en este sentido y solamente sirvió para fijar la fecha tope: el próximo jueves.
Hasta entonces, los jefes cavilan sobre la propuesta de la FIA, que señala que las dos mejores vueltas de cada piloto en las tres rondas de la sesión se agregarían a partir del Gran Premio de China. "No tengo ni idea si eso será lo que veremos en China, pero realizaremos un análisis detallado, haremos posibles ajustes si es posible y estoy seguro de que podremos tomar una decisión que le vaya bien a todo el mundo", insiste Arrivabene.
Sin embargo, lo que muchos jefes quieren realmente es volver a tener el sistema de 2015, pero Jean Todt y Bernie Ecclestone han descartado la posibilidad, mientras que Christian Horner, jefe de Red Bull, supuestamente ha indicado que vetará cualquier cambio en el sistema actual. "No estoy seguro de nada ya; necesitamos un cambio. No podemos quedarnos con lo que tenemos, eso no se puede aceptar", añade Toto Wolff, jefe de Mercedes.