Marchionne, que se siente indignado por ser considerado el malo de la película, ha defendido la posición de su compañía y ha criticado a la directiva del deporte por no entender la razón empresarial por la que se ha vetado. "Pensar que la FIA y la FOM puedan transferir a los fabricantes de motores la obligación y la responsabilidad de financiar los motores a otros equipos es un concepto ofensivo." dijo a periodistas en Mugello, durante la Ferrari Finali Mondiali.
"Creo que Jean Todt está buscando una solución. Pero no pienso que se pueda considerar a Ferrari incoherente con respecto al desarrollo de su unidad de potencia. Este asunto debe solucionarse con Ecclestone y el resto. No es un problema de ferrari, y la idea de que tengamos la obligación moral de proveer motores, roza el límite. Y lo mismo se puede decir respecto a imponer límite de precio a las unidades de potencia. Si se conocieran los costes de desarrollo, los precios de los que se habla ni siquiera cubren las bujías. Esto no tiene ninguna lógica industrial ni empresarial."