El equipo Ferrari llevó un paquete de chasis revisado para Barcelona; Vettel estuvo rodando con unas nuevas mejoras, mientras que Räikkönen "sacrificó" su resultado por el equipo al rodar con un modelo antiguo. Pero, a pesar de que Vettel sumó su cuarto podio en cinco carreras, el alemán acabó a 45 segundos por detrás de Nico Rosberg, lo que supone la distancia más grande entre Mercedes y Ferrari en lo que llevamos de temporada 2015. Arrivabene ha insistido en que los datos del equipo mostraban que las mejoras eran un paso adelante, pero reconoció que hace falta trabajar más. "Si lo comparas con el coche que Kimi pilotó, fue un avance, pero no es suficiente para reducir la distancia con Mercedes".
"No somos ciegos. En el último sector perdíamos alrededor de mdio segundo. No quiero evadir la realidad, eso está ahí. Tenemos una comparación interna que nos muestra que la solución es buena, pero la realidad nos dice que no es suficiente. El equipo ha de comprender si está relacionado con este circuito o si en realidad es algo que hemos de analizar profundamente. Hemos de averiguar cómo mejorar el nuevo paquete, pero está claro que este es mejor que el anterior. Observaremos los números y tomaremos una decisión. Si cometemos un eror, os lo diremos", añade Arrivabene en declaraciones para Autosport.
Lejos del ritmo
Por último, el italiano quiso apuntar que, aunque luchar por el título no era factible debido al rendimiento, sigue esperando que el equipo consiga el objetivo que se marcó en pretemporada: ganar dos carreras. "Estar en la lucha por el Mundial es un poco demasiado. Sigo creyendo que lo podemos conseguir [las dos victorias], pero no se consigue nada en la vida sin trabajar duro. No me importa realmente estar en el podio. Si se observa la situación que tuvimos el año pasado, ahora en cada fin de semana estamos en el podio. Lo que me importa ahora es la distancia. Si quieres ganar dos o tres carreras, has de estar ahí y, de momento, no lo estamos".