Sin embargo, tras la carrera en Spa-Francorchamps, Hamilton indicó que Rosberg había admitido que provocó el toque a propósito durante una reunión del equipo tras el Gran Premio. Por su parte, el jefe de Mercedes, Toto Wolff, que estuvo presente en la reunión, negó que el contacto fuera deliberado, pero admitió que Rosberg estaba tratando de "hacerse notar".
Nuevas pruebas
Cuando el contenido de la reunión se reveló a la prensa, los resultados ya se habían hecho oficiales por los comisarios. El lunes, la FIA confirmó además que no consideraría revisar los resultados a menos que se presentara nueva información a la federación de forma oficial.
"La FIA no intervendrá en este problema. Solamente un 'nuevo elemento' que aparezca después de los resultados finales podría justificar que comenzáramos una investigación. Un comentario supuestamente realizado durante una reunión interna y luego rechazado por el mismo equipo no supone ningún 'nuevo elemento'", declaró el jefe de comunicaciones de la FIA, Pierre Regent, al periódico Daily Mail.