A parte de esos tres abandonos de Mercedes, los pilotos han conseguido sumar un doblete en el resto de carreras disputadas, dejando ver que la fiabilidad es pieza esencial en el puzle para ver quién consigue alzarse con el Mundial. "Sin duda, va a ser una parte crucial en ello, sobre todo al final de la temporada, cuando tenemos que contar con los motores y las cajas de cambio durante un largo periodo de tiempo. Nunca sabes cuándo algo puede ir mal, así que espero que podamos rectificar los problemas que tengamos. Pero puedes tenerlo todo (el mejor coche, el mejor ritmo, la mejor velocidad en recta) y no tener problemas. Las cosas están en el límite", indicó Hamilton.
Rosberg no se rinde
Es un hecho que Rosberg parece estar listo para aceptar, dado el nivel de dominio de Mercedes este año. Y, ahora, el alemán espera que la victoria de Hamilton fuera algo aislado y que su racha regrese en Alemania, en su casa. "Las cosas estaban yendo bien en Silverstone hasta que tuve el problema, así que simplemente lo acepto como un fallo de fiabilidad y me preparo para la siguiente carrera en Hockenheim. Estamos seguros de tener una buena comprensión de todos los problemas que hay en el coche, los pequeños, y estamos trabajando en ellos. ¿Estoy preocupado? No, pero obviamente las cosas no están al 100%, como ya vimos en Silverstone", quiso explicar Rosberg.
A pesar de lo que ocurrió en la carrera, lo positivo para Rosberg es que sigue manteniendo una pequeña ventaja en el Mundial de cara a Alemania, aunque solamente sea de cuatro puntos: "Tras lo que sucedió en la última carrera, fue complicado encontrar buenas sensaciones de forma inmediata. Pero sí, sigo estando al frente del Mundial de cara a mi carrera de casa, y eso es algo bueno. Siempre he contado con un gran apoyo por parte de los espectadores alemanes; son muy entusiastas".
