Tras la aprobación del Consejo Mundial, la velocidad del 'pitlane' se reducirá de forma inmediata, por lo que los monoplazas ya no podrán avanzar a un máximo de 100km/h durante la carrera, sino de 80km/h durante todo el fin de semana. Además de haberse diseñado para mejorar la seguridad, ya que los mecánicos de boxes tendrán que lidiar ahora con la misma velocidad en los coches durante la carrera y los entrenamientos, el cambio en la velocidad tendrá implicaciones estratégicas.
Paradas más largas
Para el 'pitlane' de Hungaroring, que se alarga hasta un total de 341 metros, el tiempo que tardarán los pilotos en recorrer la recta de boxes se incrementará: con el anterior límite, los monoplazas tardaban un total de 12,3 segundos y, ahora, les costará 16,4. El aumento del tiempo podría tener como consecuencia que los equipos decidan realizar menos paradas en boxes.
El Consejo Mundial también ha aprobado la introducción de una regla que estipula que todos los miembros de los equipos que trabajen en el monoplaza durante las paradas en boxes deban llevar casco. El Artículo 23.11 de las Regulaciones Deportivas de la F1 revisadas estipula: "Todo el personal del equipo que lleve a cabo cualquier labor en el coche durante una parada en boxes deberá llevar protección en la cabeza".