Siguiendo estos versos, ligeramente modificados, del gran Gustavo Adolfo Bécquer surge la respuesta a la pregunta del millón. Surge la respuesta de las entrañas de la tradición y de los anhelos de la tecnología. Fluye la respuesta de las apuradas de frenada y de los veintidós motores rugiendo al compás de una obra comenzada hace ya más de cincuenta años. La respuesta, o tal vez debería escribir 'las respuestas', está en cada imagen plasmada a través del obturador y con la cara pegada al visor, está en cada juego de colores, en cada brillo que resplandece.
La poesía en la Fórmula 1 se puede apreciar, a pesar del rugir de los ocho cilindros o del griterío de la grada española cuando Alonso cruza la línea de meta victorioso, en esos pequeños detalles de cada fin de semana que hacen especial a esta categoría y que le dan ese tono lírico que a los viejos del lugar les atrajo décadas atrás.
La poesía de esta temporada tal vez tenga tonalidades germanas, pero también refleja el carácter luchador de los pueblos mediterráneos y esos sabores a oliva y vid de las huertas bañadas por el 'Mare Nostrum'. Desde aquel sol de las antípodas que se escondía tras la 'panza de burro' que creaban las nubes australianas y que tan poética imagen nos regalaba ha pasado ya tres meses y desde entonces Mercedes-AMG ha pasado por los famosos tres estados de Niezstche.
De niño, inocente, con un gran potencial en su haber y al cual nadie creía como su rival al león, activo y victorioso, sobre todo a una vuelta, para terminar en las últimas semanas siendo el camello, que soporta la carga y al que todas las miradas parecen apuntar. Esta es la poesía de la Fórmula 1, distinta, única. Con un sol resplandeciente es capaz de ofrecernos una instantánea como la que acompaña a este texto en la que el W04 de Nico llega a la frenada de la penúltima curva del trazado 'aussie' y piensa en reducir hasta la1ª o 2ª marcha, intentando meter el monoplaza en su sitio mientras los colores ocres, verdes y dorados que le rodean son testigos de uno de esos momentos de poesía.
¿Qué es poesía?-me preguntas aún ahora. ¿Qué es poesía? Poesía es cada kilo de peso sobre el pontón. Poesía es, aún hoy, una derrapada a tiempo y un puño al cielo bajo la bandera a cuadros. Poesía...eres tú.