"Los neumáticos del año pasado eran completamente utilizables, pero puede ser que hayan querido mejorar el espectáculo obligando a los equipos a realizar una parada más en carrera. Pero después de haber invertido millones en el túnel de viento, motores y pilotos, los equipos llegan al circuito y descubren que los neumáticos no son tan utilizables. Es una situación desafortunada. Ahora que hay solamente un suministrador de neumáticos en F1, las gomas no deberían tener tanta importancia en la competitividad de cada uno", asegura Gerhard Berger a la agencia APA.
Análisis excesivo
Y, al parecer, Berger no es el único que mantiene esta perspectiva de cara a la nueva gama de neumáticos que ha creado Pirelli para esta temporada. Dietrich Mateschitz, propietario del equipo Red Bull Racing, opina exactamente lo mismo: "Sería algo bueno si se nos suministrara unos neumáticos que no exigieran siempre que los analizáramos día tras día".