La leyenda continúa
El brasileño volvió a estar en boca de todos gracias al casco que utilizó durante la temporada de 1991 en la F1 y con el que ganó el título mundial ese año. El casco se subastó por nada menos que 85.000 euros. Según el vendedor, la persona que proporcionó el casco de Senna a la subasta fue el propio Ron Dennis.
Pero el casco no fue el único objeto del piloto brasileño que se subastó, ya que también se puso a la venta uno de sus trajes, por el que el mejor postor pagó la friolera cantidad de 41.000 euros. Queda claro que la leyenda de Senna sigue presente, no solo en el cine o en las subastas, sino en el corazón de todos los amantes de este deporte.