Este miércoles se dio a conocer que dicho sistema había obtenido luz verde por parte de la FIA desde el inicio del pasado año, por lo que los equipos rivales empiezan ahora a buscar la manera de adaptarlo a sus diseños y sacar sus propias versiones para esta temporada. Ferrari ha estado trabajando ya en el desarrollo de este sistema, y está a la espera de que la FIA les confirme que cumple con el reglamento.
Esperan el visto bueno de la FIA para emplearlo en los test
La decisión de la Federación Internacional de Automovilismo se espera que llegue con tiempo suficiente para que el equipo de Maranello pueda instalar el dispositivo en su monoplaza antes de los primeros test de pretemporada.
Stefano Domenicali explicó este miércoles en Madonna di Campiglio que ha existido comunicación entre los equipos y la FIA sobre el asunto en cuestión: "Hablamos de algo que está más relacionado con tener estabilidad en frenada. Es un sistema sobre el que sé que ha habido algún intercambio de documentos entra la FIA y los equipos."
"Estamos esperando por la confirmación final para saber si este tipo de dispositivos serán válidos o no. Obviamente, nosotros estamos investigando para saber si pueden ayudar a mejorar nuestro rendimiento, pero debemos esperar la reacción de la FIA en este asunto."