El acuerdo actual que permite a RBR montar motores de la marca del rombo finaliza al término de la temporada 2012, pero Dietrich Mateschitz, presidente del equipo, ha dicho: "Siempre hemos intentado estar asociados con un gran fabricante. Renault seguirá siendo nuestra primera opción para lograr un acuerdo para 2013 y más allá".
A pesar de estas dos últimas temporadas, tenemos que recordar que en Red Bull no siempre han estado satisfechos con los propulsores franceses. Adrian Newey se quejó en el pasado en más de una ocasión de que la potencia del "corazón" de su creación no era suficiente. Por eso a finales de la temporada 2009 la escudería austriaca negoció con Mercedes-Benz, pero se rumorea que McLaren vetó aquel posible acuerdo.
La renovación estaba cerrada con los 4 cilindros
Helmut Marko, asesor deportivo de Red Bull, ha confirmado a Autosport que las negociaciones estaban cerca de materializarse hasta que se aprobó la implantación de los V6: "Hablar con Renault sobre 2013 y más allá había progresado muy bien, porque esperábamos montar el cuatro cilindros turbo de 1.6 litros. Una extensión de nuestro contrato estaba cerrada hasta que apareció la nueva situación".
"En cuanto al V6 turbo a partir de 2014 hemos recibido señales positivas de Renault, pero tenemos que negociar los detalles de la nueva situación", reconoció Marko.
También se había especulado recientemente con la posibilidad de que Red Bull construyese sus propios motores, teniendo a la empresa austriaca 'AVL List' como socia, pero Mateschitz lo ha descartado. "Sólo en condiciones extremas y con ningún fabricante disponible para nosotros" irían por ese camino, dijo.